La Escuela N.º 210 de Esquel continúa enfrentando dificultades por la ausencia de calefacción en su edificio, situación que afecta el normal desarrollo del ciclo lectivo. Desde abril, la institución ha implementado alternativas para garantizar la continuidad educativa, y desde el 2 de octubre permanece sin suministro de gas para facilitar la instalación de dos nuevas calderas.
Gabriela Toledo, directora de la escuela, informó que este jueves está programada una prueba interna para conectar las calderas a la red de gas, un paso fundamental para poder retornar a la presencialidad completa. "La empresa ha estado trabajando en la conexión, surgieron inconvenientes y se hicieron ajustes de acuerdo con la normativa vigente. Ahora resta esperar que las pruebas salgan bien", explicó Toledo.
Ante la imposibilidad de utilizar el edificio escolar, la escuela implementa una modalidad mixta que combina tareas en el hogar con clases alternadas en el Centro de Encuentro, donde funciona la Universidad del Chubut. Solo cuentan con tres salones disponibles por la mañana, lo que obliga a rotar los grados. La directora reconoció que esta situación afecta la continuidad pedagógica: "Priorizar contenidos, pero no es lo mismo que estar todo el tiempo en forma presencial".
La Escuela 210 comparte sus instalaciones con un jardín de infantes y con el ISET 815, hecho que complejiza la organización. Consultada sobre si es posible separar las instalaciones, como se hizo en la Escuela 8, Toledo indicó que esa decisión corresponde a Obras Públicas. Mientras tanto, docentes, familias y estudiantes permanecen atentos al resultado de la prueba técnica, con la esperanza de volver pronto al edificio.