La crisis educativa golpea de lleno. Según el último informe de Argentinos por la Educación, en el país apenas 10 de cada 100 estudiantes completan la secundaria en tiempo y forma, es decir, sin repetir y alcanzando aprendizajes satisfactorios en Lengua y Matemática.
En Chubut, la situación muestra un leve mejor desempeño: 16 de cada 100 estudiantes llegan a la meta en condiciones aceptables. Sin embargo, detrás de ese porcentaje se esconde una realidad preocupante: la gran mayoría no logra terminar en el tiempo esperado o lo hace con graves dificultades en los contenidos básicos.
Los especialistas apuntan a causas estructurales: ausentismo, desigualdades socioeconómicas, repitencia y sobreedad. A esto se suma el impacto de las interrupciones del ciclo lectivo por conflictos gremiales, que en Chubut se repiten con frecuencia y profundizan las brechas.
Las pruebas nacionales también reflejan un escenario dispar. Si bien la provincia mostró en 2024 una mejora en comprensión lectora respecto de años anteriores, los niveles en Matemática siguen siendo bajos y limitan las posibilidades de los jóvenes de continuar estudios superiores o insertarse en empleos de calidad.
La comparación con la media nacional revela que Chubut se encuentra por encima, pero aún muy lejos de un estándar deseable. El desafío es enorme: reforzar aprendizajes básicos desde primaria, acompañar a los alumnos que más lo necesitan y garantizar continuidad de clases.
“Terminar la secundaria con aprendizajes sólidos es la llave de acceso al futuro. Hoy, la mayoría de los estudiantes de Chubut no la tienen”, advierten desde el sector educativo.