La región de Esquel, Trevelin y la Cordillera está atravesando una crisis energética que afecta gravemente a sus habitantes y su economía. La falta de nuevas conexiones de gas por parte de Camuzzi y las tarifas eléctricas más caras de la región, han dejado a muchas familias en una situación desesperada, destinando gran parte de sus ingresos a calefaccionarse.
Falta de Conexiones de Gas
A pesar de las promesas de repotenciación del Gasoducto Cordillerano, las obras necesarias para ampliar la red de gas aún no se han concretado. La instalación de una nueva Planta Compresora en Río Senguer y un equipo motocompresor de Back-Up en la Planta Compresora Gobernador Costa son esenciales para eliminar las restricciones actuales y permitir que más hogares accedan al gas natural. Sin embargo, la demora en la ejecución de estas obras ha dejado a cientos de familias sin acceso a este servicio básico, obligándolas a buscar alternativas costosas y menos eficientes para calefaccionarse.
Camuzzi tampoco ha realizado las inversiones necesarias para mejorar la infraestructura y ampliar la red de gas. La empresa ha argumentado que, aunque las tarifas se han ajustado, los costos operativos y de inversión siguen siendo elevados, lo que dificulta la ejecución de las obras planificadas. Esta situación ha generado frustración entre los usuarios, que ven cómo sus facturas aumentan considerablemente sin que se refleje una mejora en el servicio.
Tarifas Eléctricas Elevadas
La situación se agrava aún más con las tarifas eléctricas, que son de las más altas de la región. Las familias de Esquel, Trevelin y la Cordillera deben destinar una parte significativa de sus ingresos para pagar las facturas de electricidad, especialmente durante los meses de invierno, cuando la demanda de calefacción es mayor. Esta combinación de altos costos energéticos y falta de acceso al gas natural ha generado una carga económica insostenible para muchas familias.
Impacto en la Economía Familiar
La crisis energética tiene un impacto directo en la economía de los hogares. Muchas familias se ven obligadas a reducir otros gastos esenciales, como alimentos y educación, para poder cubrir los costos de calefacción. Además, la falta de gas natural y las altas tarifas eléctricas afectan la calidad de vida de los habitantes, quienes deben enfrentar temperaturas extremadamente bajas sin los recursos adecuados para mantenerse calientes.
Reclamos y Movilizaciones
Ante esta situación, los vecinos de Esquel y la Cordillera han comenzado a movilizarse y a exigir soluciones inmediatas. Han presentado cartas abiertas a las autoridades y han organizado protestas para visibilizar su problemática. La comunidad espera que las obras de repotenciación del gasoducto se inicien lo antes posible y que se revisen las tarifas eléctricas para hacerlas más accesibles.
Conclusión
La crisis económica y energética en Esquel y la Cordillera es un problema urgente que requiere la atención y acción inmediata de las autoridades. Las familias no pueden seguir destinando gran parte de sus ingresos a calefaccionarse mientras esperan por soluciones que parecen no llegar. Es esencial que se implementen medidas efectivas para garantizar el acceso al gas natural y reducir las tarifas eléctricas, mejorando así la calidad de vida de los habitantes de la región.