El día martes marca un nuevo capítulo en la lucha contra los incendios forestales que afectan la Cordillera. Se incorporan a las operaciones bomberos voluntarios y brigadistas desplazados desde otros Parques Nacionales, sumándose a los esfuerzos conjuntos para contener las llamas. Dos helicópteros, que realizaron más de 40 descargas de agua, operan en la zona, mientras se informa que la operatividad de aviones hidrantes es inviable debido a la geografía del área.