El Gobierno argentino anunció que el Impuesto PAIS, que grava el dólar tarjeta, dejará de aplicarse a partir del 24 de diciembre de 2024. Esta medida implica que el recargo del 30% asociado a este tributo se eliminará, aunque se mantendrá otro 30% como percepción a cuenta de Ganancias y Bienes Personales. Con esta modificación, se espera que el dólar turista, que incluye ambos recargos, reduzca significativamente su precio a partir de principios de 2025, aunque seguirá siendo menos competitivo que opciones como el dólar MEP.
Actualmente, el dólar turista se posiciona en $1.642,40, teniendo en cuenta el valor del dólar minorista y considerando los recargos actuales. Por su parte, el dólar MEP cotiza a $1.080, siendo una alternativa más económica para cancelar consumos en moneda extranjera. Según las proyecciones del mercado a plazo, se estima que el dólar turista caerá en enero a $1.376 pesos. Esto representa una disminución en comparación con su valor actual, pero aún se mantiene por encima del dólar MEP.
La eliminación del Impuesto PAIS ha influenciado las decisiones de los consumidores, especialmente en lo que respecta a la compra de dólares financieros. Según el balance cambiario del Banco Central, las salidas netas de divisas por turismo han aumentado en los últimos meses. En septiembre de 2024, la cifra alcanzó los USD 714 millones, mostrando una demanda sostenida de divisas para consumos en el exterior. Sin embargo, muchos de estos pagos se realizan con dólares propios adquiridos a través del dólar MEP, evitando así presionar sobre las reservas del Banco Central.
Si bien se espera que la eliminación del Impuesto PAIS haga que el dólar tarjeta sea más competitivo, su valor seguirá siendo superior a otras opciones como el dólar MEP o el dólar libre, dependiendo de la estabilidad de estas cotizaciones. El Gobierno busca lograr un equilibrio económico antes de levantar el cepo cambiario en 2025, pero aún existen desafíos para mantener la estabilidad de las reservas frente a un posible incremento en los consumos internacionales.
Además del fin del Impuesto PAIS, el Banco Central ha flexibilizado el acceso al dólar MEP para sectores antes restringidos, como beneficiarios de planes sociales, con el objetivo de reducir distorsiones cambiarias y democratizar el acceso al mercado. Sin embargo, persiste el debate sobre el esquema de recargos para el dólar turista, ya que algunos funcionarios consideran incrementar las percepciones a cuenta de impuestos para evitar una mayor erosión de las reservas internacionales.
Un aspecto a tener en cuenta son los pequeños consumos en dólares, como servicios de streaming y almacenamiento online, que suelen pagarse al dólar tarjeta más caro. Si la brecha entre las diferentes cotizaciones del dólar se reduce, es posible que incremente el uso del dólar tarjeta para estos gastos, lo cual podría complicar la dinámica de las reservas internacionales.