Según se pudo conocer, el paciente, un hombre de 63 años, fue internado inicialmente sin aislamiento, dado que los síntomas no sugirieron de inmediato la infección por hantavirus. Sin embargo, su estado de salud empeoró rápidamente durante la jornada, por lo que fue evaluado por profesionales de terapia intensiva y, antes de su traslado a esa área, se le realizó el hisopado que confirmó la infección. A la madrugada del domingo, el hombre falleció.
A pesar de que el personal de salud utilizaba barbijos triple capa, el equipo que tuvo contacto directo con el paciente fue aislado preventivamente. Sus compañeros están cubriendo sus funciones debido a la falta de personal disponible. Además, otros profesionales también están en aislamiento preventivo.
El Dr. Víctor Parodi brindó detalles sobre el caso, indicando que "todavía sigue trabajando el área de Epidemiología para definir algunos contactos estrechos. Es un masculino de 63 años que ingresó al hospital con un síndrome pulmonar grave, que en su comienzo el día previo aparentemente tuvo episodios de fiebre y dolores musculares. La evolución fue muy brusca, lamentablemente en pocas horas evolucionó mal".
Parodi comentó sobre los síntomas y la evolución del hantavirus, señalando que "muchas personas viven solas y la ayuda llega un poco tarde. Este es el caso, había empezado con síntomas dos o tres días previos a la consulta".
Respecto al protocolo, explicó: "tenemos dos instancias, la variante andina por hantavirus es un síndrome pulmonar infeccioso, poco frecuente, que puede comenzar con un cuadro similar a una gripe y rápidamente evolucionar hacia una forma grave. Un gran porcentaje lamentablemente tiene esa clase de evolución". Además, destacó la importancia de definir y aislar a los contactos estrechos del paciente para controlar la propagación del virus.
Parodi mencionó que "hasta ahora tenemos 9 personas como contacto estrecho, a las cuales se les seguirán haciendo los análisis correspondientes cada siete días". También subrayó la necesidad de vacunación, especialmente para las personas mayores de 65 años con enfermedades previas.
El origen exacto de la infección del paciente aún se desconoce, y la investigación epidemiológica continúa para determinar los contactos y el lugar donde pudo haber contraído el hantavirus.