El incendio forestal que afecta a la localidad de Epuyén desde el miércoles tuvo este sábado un nuevo episodio crítico. Las altas temperaturas, el viento y la baja humedad generaron una reactivación significativa en el cañadón del Cerro Gladys, donde las llamas mostraron mayor actividad durante la tarde, levantando una columna de humo visible desde toda la región.
El fuego, que permanece activo y fuera de control, ya ha arrasado más de 2.700 hectáreas de bosque implantado, bosque nativo, matorrales y pastizales. Ante esta nueva propagación, más de 200 brigadistas y recursos aéreos intensificaron las tareas en los puntos calientes para evitar que el incendio avance hacia otras áreas.
Condiciones climáticas adversas
Las temperaturas extremas jugaron un rol crucial en esta reactivación. Este sábado, el termómetro marcó una máxima de 30°C, con una humedad relativa del 20% y vientos de 15 a 25 km/h con ráfagas, condiciones ideales para la propagación del fuego. Las perspectivas para el domingo son aún más complicadas, con una máxima esperada de 31°C, una humedad mínima del 15% y vientos persistentes del sector oeste.
Acciones en terreno
El operativo, coordinado por el Servicio Provincial de Manejo del Fuego del Chubut (SPMF), moviliza a brigadistas de Epuyén, Golondrinas, Cholila, Lago Puelo, El Maitén, Río Senguer, Esquel y Trevelin, con apoyo de la Brigada Nacional Sur del SNMF, Parques Nacionales y otros organismos. En las tareas también participan dos aviones hidrantes, un avión observador y un helicóptero con helibalde, que refuerzan las labores desde el aire.
Los esfuerzos se concentran en frenar el avance del fuego en el Cerro Gladys, un sector crítico debido a la complejidad del terreno y la actividad reciente de las llamas. Brigadistas emplean herramientas manuales, equipos de agua y maquinaria pesada para contener el incendio.
Un llamado a la precaución
El SPMF agradeció la colaboración de la comunidad y recordó la importancia de mantenerse informados a través de fuentes oficiales. Enfatizó la necesidad de extremar precauciones para evitar nuevos focos de incendio, especialmente dadas las condiciones climáticas desfavorables.
La lucha contra el fuego sigue siendo intensa, con los equipos en terreno trabajando sin descanso para proteger el entorno natural y las comunidades afectadas.