Un intenso temporal ha sorprendido a Bahía Blanca en las últimas horas, dejando tras de sí un panorama desolador. Hasta el momento, al menos seis personas han fallecido a causa de este fenómeno climático, que se ha manifestado con lluvias torrenciales, ráfagas de viento y granizo. La magnitud de los daños ha llevado a las autoridades locales a declarar el estado de emergencia, activando protocolos de asistencia para ayudar a los damnificados.
Las calles de la ciudad se transformaron en verdaderos ríos, dificultando el tránsito y propiciando la caída de árboles y postes de luz. En varios sectores, el agua ha alcanzado niveles alarmantes, inundando tanto hogares como comercios. Esto ha llevado a miles de evacuaciones, con habitantes trasladándose a los centros de asistencia dispuestos por el municipio. La reacción solidaria de la comunidad ha sido destacable, con numerosas donaciones de alimentos y ropa para quienes han perdido prácticamente todo en esta catástrofe.
Las autoridades de Defensa Civil han hecho un llamado a la ciudadanía para que se mantenga alerta y evite salir de sus viviendas a menos que sea estrictamente necesario. Además, se han puesto en marcha operativos de rescate para asistir a quienes quedaron atrapados por la inundación en sus casas. Al mismo tiempo, los equipos de emergencia están trabajando arduamente en la evaluación de los daños sufridos por la infraestructura de la ciudad, que ha estado severamente afectada. La comunidad atraviesa un momento de gran tristeza y preocupación, mientras espera que la situación mejore y se restablezca la normalidad en la región.