El precio del crudo Brent, utilizado como referencia en Argentina, continúa en descenso y alcanza su valor más bajo desde abril de 2021, cotizando a 59,33 dólares en la jornada del miércoles. Si bien la actividad en Vaca Muerta puede resistir esta caída del precio internacional, existen dudas sobre nuevas inversiones en la región de Chubut y Santa Cruz.
La guerra comercial desencadenada por Estados Unidos y su escalada de aranceles, principalmente dirigidos hacia China, ha generado una crisis global cuyas consecuencias son inmediatas para las áreas petroleras del país. El precio del crudo Brent y del WTI (petróleo de referencia de Estados Unidos) se sitúa en 59,33 y 56,08 dólares respectivamente, lo que mantiene a los analistas locales pendientes de las próximas operaciones de venta del petróleo Escalante de Chubut.
A pesar de que se ha logrado acordar la operación de un embarque local a un precio de 57 dólares por barril, con un descuento de 2 dólares sobre el valor del Brent, la situación sigue siendo preocupante. El único aspecto positivo es que, con precios por debajo de 60 dólares por barril, no se aplican retenciones del 8% a la exportación.
Sin embargo, el cruce entre el precio internacional y el costo de producción de cada barril en la cuenca San Jorge se vuelve una variable crucial. Los costos de producción varían entre los 30 y 50 dólares por barril, lo que puede resultar en un precio de extracción más alto que el de venta, especialmente en algunos pozos de El Tordillo que rondan los 61 dólares. Esta situación podría llevar al mercado interno de refinación de petróleo a considerar más viable la opción de importar petróleo en lugar de comprarlo de la cuenca San Jorge.
Además, la posibilidad de importar crudo pesado para la mezcla necesaria en las refinerías del país amenaza la venta del crudo de Chubut y Santa Cruz a un precio mayor al que Vaca Muerta podría ofrecer. Según Horacio Marín, CEO de la petrolera, Vaca Muerta está preparada para operar con un precio de barril a 45 o 40 dólares, asegurando que los costos operativos y el alto nivel de producción permiten atravesar la crisis sin mayores sobresaltos.
Es importante mencionar que los costos de producción en Vaca Muerta oscilan entre los 6 y 7 dólares por barril, lo cual contrasta con los mencionados valores de la cuenca San Jorge. Esta diferencia geológica y productiva deja en evidencia la incertidumbre que enfrenta la región de San Jorge ante la posibilidad de que las refinerías opten por importar crudo pesado en lugar de adquirirlo de esta cuenca.
La caída del mercado internacional y las variables económicas locales plantean desafíos para la actividad petrolera en el país, y los precios actuales ponen en duda la viabilidad de mantener un determinado nivel de actividad y los planes de inversión en Chubut. Es necesario seguir de cerca la evolución de la situación y estar atentos a las decisiones que se tomen tanto a nivel nacional como internacional.