El clima en el ámbito educativo provincial volvió a tensarse. Docentes de Chubut manifestaron un profundo malestar luego de que, sin previo aviso, el Gobierno provincial descontara de los haberes de este mes el “bono” que había sido liquidado —y pagado— durante el mes pasado, en plena campaña electoral.
La situación generó indignación no solo por el impacto directo en los bolsillos, ya de por sí golpeados por la pérdida del poder adquisitivo, sino también por la absoluta falta de comunicación oficial. Hasta hoy, desde el Ministerio de Educación no se emitió ninguna explicación ni comunicado que aclare los motivos de la devolución compulsiva del monto pagado incorrectamente.
Los gremios docentes, por su parte, tampoco han logrado brindar una respuesta concreta a sus afiliados sobre qué ocurrió y por qué el ajuste se aplicó de forma unilateral. El desconcierto se profundiza entre trabajadores que se encontraron con su salario reducido sin ningún tipo de notificación previa.
En los pasillos del Ministerio circula una versión que alimenta aún más la incertidumbre: el ministro José Luis Punta tendría “los días contados” al frente de la cartera, situación que explicaría su ausencia pública y el silencio que rodea al conflicto. Mientras se acumulan las quejas y aumenta la bronca, los docentes reclaman algo básico: una explicación sobre lo sucedido y previsibilidad salarial en un contexto económico cada vez más difícil.