Su debut en el Torneo Cordillerano en Esquel fue más que un simple partido: representó el renacer de un equipo que, a pesar del tiempo fuera de competencia, mostró gran pasión, compromiso y compañerismo.
Aunque el resultado final no fue favorable, el verdadero triunfo fue la vuelta del equipo, uniendo nuevamente a jugadoras veteranas y nuevas, con el orgullo de representar a Cholila.
Este emocionante retorno promete ser el inicio de una etapa llena de logros, que servirá como inspiración para las futuras generaciones.