En el peronismo se vuelve prioritaria la necesidad de que Axel Kicillof y Cristina Kirchner se reúnan para resolver la estrategia electoral de la provincia de Buenos Aires. La fragmentación interna es inviable para todos y obstaculiza la articulación política y los acuerdos necesarios. Es fundamental que ambos líderes logren una tregua y un acuerdo, dejando de lado resentimientos y diferencias.
Desde diversos sectores del peronismo y del kirchnerismo se impulsa la idea de una mesa tripartita que incluya a Sergio Massa como mediador, aunque este último se niega a asumir ese rol. La necesidad de esta reunión refleja un cambio de época en la fuerza política y la importancia de llegar a acuerdos entre los tres líderes más relevantes: Cristina Kirchner, Sergio Massa y Axel Kicillof.
Para facilitar la comunicación y establecer puentes entre las partes, existen intermediarios como el ministro de Gobierno Carlos Bianco y la secretaria general de la Gobernación Agustina Vila por parte de Kicillof, la senadora bonaerense Teresa García y el diputado provincial Facundo Tignanelli por parte de Cristina Kirchner, y el director del BAPRO Sebastián Galmarini y el legislador bonaerense Rubén "Turco" Eslaiman por parte de Massa. A través de estos contactos se intenta acercar posiciones y superar las diferencias existentes.
Es importante destacar que Axel Kicillof ha ganado peso dentro del peronismo al convertirse en gobernador de la provincia de Buenos Aires, la más poblada del país, y al ser considerado como principal precandidato presidencial. Esto ha llevado a ciertos dirigentes a reconocer la necesidad de incluirlo en las mesas de definiciones y de tomar en cuenta su voz en la toma de decisiones.
La relación entre Kicillof y Cristina Kirchner, así como con La Cámpora liderada por Máximo Kirchner, sigue siendo fría y distante debido a las diferencias y la voluntad del gobernador de mantener una autonomía en sus decisiones. Sin embargo, ambos sectores coinciden en la necesidad de armar una estrategia conjunta y evitar la división del peronismo, ya que esto solo beneficiaría a otros actores políticos como Javier Milei.
La eliminación de las PASO, el desdoblamiento de las elecciones bonaerenses y el uso de la boleta única papel son temas sensibles que deben ser consensuados en la mesa tripartita. Desde la gobernación se busca buscar un acuerdo con todos los sectores importantes de la coalición para evitar conflictos públicos y acercar posturas.
En definitiva, la unidad del peronismo es fundamental para poder competir en las elecciones del próximo año. A pesar de ciertas posturas que abogan por la existencia de dos listas, es evidente la necesidad de generar una mesa política y una tregua entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof para llegar a acuerdos que permitan una candidatura sólida y competitiva.
Más allá de las diferencias y los desafíos presentes, la necesidad de un encuentro entre los líderes del peronismo es innegable. Solo a través del diálogo y el consenso se podrá superar la fragmentación y alcanzar una estrategia común para el éxito electoral.