Después de un arduo trabajo de un año, el gobierno argentino ha publicado las reformas propuestas en la Ley Nacional de Tránsito que está en vigencia desde 1995. Estas reformas, presentadas en el decreto 196/2025, representan una profunda transformación en la legislación de tránsito del país.
El documento abarca varios aspectos, desde la simplificación de trámites para circular con autos importados en el territorio argentino, hasta cambios en el formato y validez de las licencias de conducir particulares. Sin embargo, uno de los puntos más destacados es la apertura de las revisiones técnicas obligatorias para los vehículos particulares y el transporte pesado de cargas y pasajeros.
Una de las particularidades de estas reformas es que, al tratarse de modificaciones en la Ley Nacional de Tránsito, es necesario que las provincias y municipios decidan adherirse a estas nuevas normativas para que tengan validez en sus jurisdicciones. Sin embargo, desde el Ejecutivo destacan que estas medidas brindan el marco adecuado para aquellos que deseen aprovecharlas.
"Fue como el parto de una ballena, porque las ballenas están preñadas un año, y esto nos llevó, literalmente, un año", expresó Federico Sturzenegger, ideólogo de estas reformas desde el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado.
Dentro de las 11 modificaciones que se realizaron, una ya se había adelantado la semana pasada: la simplificación del trámite de homologación de trailers y casas rodantes, evitando certificaciones duplicadas. Además, se han establecido requisitos simplificados también para la importación de vehículos, por medio de un nuevo documento llamado Certificado de Seguridad Vehicular (CSV), que es válido tanto para unidades fabricadas en Argentina como para importadas de otros países.
Otras reformas aplicadas a la Ley Nacional de Tránsito incluyen la facilitación de la importación de autos en general, la liberación de la importación de autopartes vehiculares, la eliminación de la exigencia del Certificado de Homologación de autopartes de Seguridad, la validez de las licencias profesionales de conducir entre jurisdicciones, la apertura de las Revisiones Técnicas Obligatorias, la implementación de peajes automáticos en las rutas nacionales, la adecuación normativa para permitir la circulación de vehículos de conducción autónoma, la digitalización de la Licencia Nacional de Conducir sin fecha de vencimiento, la eliminación de la obligación de renovación al cumplirse el primer año de la licencia de conducir y la eliminación de la renovación de licencia ante cambio de domicilio.
Estas reformas no solo buscan actualizar la normativa de tránsito en Argentina, sino también elevar los estándares de seguridad y simplificar los trámites para los conductores. Con estas medidas, se espera mejorar la experiencia de los usuarios en las vías de circulación y promover un tránsito más seguro en todo el país.