Un inusual evento sin precedentes tiene lugar recientemente en la costa del océano Pacífico, impactando a Chile, Perú y Ecuador con olas de hasta cuatro metros de altura. Este fenómeno, generado en el hemisferio norte, ha llevado a la adopción de medidas precautorias como el cierre de calles, evacuaciones y emisión de alertas que se extenderán hasta el martes.
Las imágenes impactantes capturadas durante este peculiar suceso se han vuelto virales en distintos puertos latinoamericanos. Se trata de un sistema frontal que produce un mar de fondo y se desplaza a lo largo de varios kilómetros, provocando escenas temibles frente a la costa.
La primera muestra de esta marejada se presenta en Viña del Mar, Chile, donde el viernes pasado una fuerte oleada sacudió la zona. En respuesta, las autoridades de Valparaíso deciden cerrar la avenida costera durante el sábado y domingo como medida preventiva ante las "marejadas anormales" que podrían causar rompimientos violentos, sobrepasos del mar y daños en la infraestructura.
Horas más tarde, este suceso impacta también en Perú y Ecuador, donde la mayoría de los puertos oceánicos son cerrados. En la ciudad de Manta, en Ecuador, se registra la trágica muerte de una persona, lo que lleva al Gobierno ecuatoriano a extender las alertas hasta el próximo martes. Pescadores y habitantes de la zona resultan afectados y se reportan daños en embarcaciones y establecimientos comerciales cercanos a la costa peruana.
En medio de este caótico escenario, decenas de turistas tienen que evacuar las playas de Viña del Mar y otras localidades costeras del Pacífico. Además, se cierran 91 de los 121 puertos en Perú, según informa el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), hasta el 1° de enero de 2025. Este fenómeno afectará a la costa norte, centro y sur del país, tras iniciar el pasado 25 de diciembre.
En la ciudad del Callao, donde se encuentra el puerto principal del país, se procede al cierre de acceso a las playas Abtao, Santa Rosa, La Arenilla y Cantolao, así como al resto de los espacios recreativos próximos al mar. Además, se prohíbe la salida de embarcaciones turísticas y pesqueras desde cualquier playa o puerto de la zona.
En medio de esta situación caótica, se destaca el rescate de 31 pescadores que quedan varados mar adentro en Perú, llevado a cabo por la Marina peruana el sábado pasado. A su vez, en Ecuador, el cuerpo de bomberos de Manta informa sobre la lamentable pérdida de una vida en la zona de Barbasquillo. Ante esto, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos determina el cierre de las playas en dicha ciudad, al suroeste de Ecuador.
El Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada (Inocar) advierte sobre la presencia de olas de hasta 2.1 metros en las provincias de Manabí, Guayas, Santa Elena y Galápagos, aconsejando tomar precauciones al realizar actividades en el mar agitado.
Sin duda, este fenómeno sin precedentes ha provocado una serie de consecuencias inesperadas en la costa del océano Pacífico, afectando a diversas comunidades y generando una situación de riesgo que requiere de la atención y cuidado de las autoridades y población involucrada.