Desde comienzos de 2024, la familia Foster, originaria de Pergamino, Buenos Aires, atraviesa momentos de profundo dolor. Todo comenzó el 6 de marzo con la muerte de Federico Foster, un atleta argentino de 47 años que falleció ahogado en la Playa Mansa de Punta del Este mientras entrenaba para una competencia.
Federico, reconocido por su destacada trayectoria deportiva que incluía cuatro Ironman en Brasil, tres clasificaciones al Mundial de Ironman 70.3 y varios podios en competencias nacionales e internacionales, desapareció en el mar mientras realizaba ejercicios para “aflojar los músculos” antes de la carrera prevista para ese domingo.
Su cuerpo fue hallado al día siguiente por efectivos de la Armada. La autopsia reveló que la causa de muerte fue ahogamiento, aunque también se detectaron golpes y sangrado nasal. El deportista llevaba un reloj detenido y se había quitado las antiparras, lo que indica que estuvo consciente antes de desmayarse y ahogarse.
Patricio Foster, hermano de Federico y triatleta además de entrenador del “Team Foster”, expresó el impacto que significó la pérdida y rindió homenaje a Federico en junio durante la Maratón Internacional de la Bandera en Rosario, cumpliendo la promesa que se había hecho tras la muerte de su hermano: “Fue más dura porque no estaba súper entrenado, pero valió la pena porque cumplí el objetivo de homenajearlo en esa carrera que habíamos corrido juntos el año pasado”.
Sin embargo, la tragedia volvió a golpear a la familia Foster en las últimas semanas. La esposa de Patricio, Antonella Prieto, cursaba el séptimo mes de embarazo y falleció repentinamente tras sufrir un paro cardíaco mientras visitaba una exposición de dinosaurios en Vicente López junto a su familia.
El episodio ocurrió alrededor de las 17:10 horas cuando Antonella comenzó a sentirse mal y se descompuso. A pesar de la rápida intervención del SAME y su traslado urgente a la Maternidad Santa Rosa, donde los médicos realizaron una cesárea de emergencia para intentar salvar a la bebé, la mujer no pudo ser reanimada.
La niña, nacida prematuramente, falleció tres días después en la maternidad. La autopsia confirmó que la causa de muerte de Antonella fue un cuadro de preeclampsia, una complicación grave del embarazo caracterizada por un aumento severo de la presión arterial que derivó en un paro cardíaco.
Según fuentes judiciales, el embarazo transcurría sin complicaciones previas y no se encontraron signos de violencia ni factores externos que expliquen el desenlace. La muerte fue caratulada como causada por causas naturales y sin indicios de responsabilidad penal de terceros.
Patricio Foster, tras esta nueva pérdida, regresó a Pergamino acompañado por su familia, enfrentando una seguidilla de tragedias que han conmocionado a su entorno y a la comunidad local.