El Chaltén, la famosa capital del trekking en Argentina, está agregando una nueva atracción que promete ser una experiencia única para los amantes de la naturaleza y la aventura. Se trata de las cápsulas de alojamiento ubicadas en un acantilado en El Chaltén. Estas cápsulas están construidas con policarbonato y ofrecen la oportunidad de dormir frente al majestuoso Fitz Roy, colgando a 270 metros de altura.
Federico Echevarría, un emprendedor inspirado por el hotel burbuja cerca de Machu Picchu en Perú, ha creado Ovo Patagonia, un hospedaje que permite a los viajeros vivir la sensación increíble de dormir colgados en una cápsula. Esta es la segunda cápsula de altura en el mundo, después de Skylodge Adventure Suites en Urubamba, Perú.
Para garantizar la seguridad de los huéspedes, se han realizado estudios sobre el impacto de las ráfagas patagónicas en las cápsulas en movimiento, así como pruebas de peso adaptadas a la zona. Además, se han instalado cinco cables de acero que soportan hasta 3000 kilos cada uno.
Cada cápsula consta de tres niveles: en el nivel más alto se encuentra la cama, seguida de un lounge minimalista y un baño seco en la parte inferior. Desde todas estas áreas se puede disfrutar de una vista panorámica de 360 grados del Fitz Roy. El sistema de calefacción funciona con aire a 12V y un guía de montaña se encarga de llevar la cena y el desayuno a los huéspedes. También se proporcionarán monóculos para observar las estrellas.
El acceso a las cápsulas se realiza a través de la estancia Bonanza, a unos 12 km de El Chaltén. Desde allí, se debe tomar un sendero de aproximadamente 40 minutos hasta la cima de la montaña donde se encuentran colgadas las cápsulas. Para garantizar la seguridad durante el trayecto, se ha colocado una pasarela con cables de acero y doble mosquetón, que actúa como una vía ferrata.
En caso de mal tiempo, se ofrece un plan B: dormir en módulos con paredes de vidrio en la cima de la montaña, lo más cercano posible a la perspectiva aérea de las cápsulas.
Los ministerios de Ambiente y Turismo ya han otorgado la habilitación correspondiente y se espera que las reservas estén disponibles a partir de los primeros meses de este año, con la temporada alta programada para el próximo verano. Una experiencia única en la que los viajeros pueden disfrutar de la belleza natural de El Chaltén mientras duermen suspendidos en el aire.