El mapa electoral de Chubut dejó una lectura dual: La Libertad Avanza (LLA) se quedó con el primer lugar en el total provincial, pero con una ventaja muy ajustada, mientras que Unidos Podemos, con Juan Pablo Luque a la cabeza, arrasó en los territorios clave de la Cordillera y la Cuenca del Golfo San Jorge.
Estos resultados reflejan una profunda diferenciación territorial del voto, donde los sectores más productivos y poblados de la provincia optaron por una propuesta más equilibrada y con fuerte arraigo local.
La Cordillera: bastión político y mensaje ambiental
En la Cordillera, Unidos Podemos logró victorias contundentes en Esquel, Trevelin, Lago Puelo, El Hoyo y Cholila, entre otras localidades. La región cordillerana volvió a expresar su rechazo a la minería promovida por el gobierno provincial y nacional, consolidando un voto en defensa del ambiente y del modelo de desarrollo turístico y sustentable que caracteriza a la zona.
El armado político en la Cordillera fue uno de los más consistentes de toda la provincia. Allí se destacaron Juan Peralta, Ezio Tracanna y Andrés Lapenna , tres referentes que articularon el trabajo territorial con fuerte presencia en la militancia local y en la agenda ambiental.
Su labor fue clave para que Unidos Podemos lograra no solo buenos resultados electorales, sino también una sólida base política que se proyecta hacia el futuro.
Comodoro: el voto del trabajo y la defensa de los recursos y las inversiones
En Comodoro Rivadavia, la otra gran victoria de Unidos Podemos, el voto tuvo un fuerte componente económico y social. La salida de YPF y la falta de respuesta del gobierno provincial ante los miles de despidos generaron un clima de profundo malestar.
Allí, el espacio de Luque capitalizó el descontento con un mensaje de defensa del trabajo, la producción y la defensa de los recursos y las inversiones, recuperando parte del espíritu combativo de la ciudad petrolera. Los cuadros sindicales, las organizaciones barriales y la estructura política local contribuyeron a sostener una diferencia amplia frente a las otras fuerzas.
El mapa y la lectura política del resultado
El resultado final muestra una provincia dividida casi en partes iguales. LLA (en violeta) obtuvo mayoría en el centro y norte de Chubut, mientras que Unidos Podemos (en blanco) se consolidó en los polos con mayor peso político y económico. Despierta Chubut (en rojo) quedó relegado a distritos aislados sin incidencia decisiva.
Aunque el escrutinio final dio una victoria ajustada a LLA, el voto territorial reconfigura el mapa político de Chubut. Unidos Podemos demostró capacidad de organización y conexión con las demandas concretas de las comunidades, especialmente en los lugares donde el gobierno provincial y nacional son vistos como una amenaza más que una solución.
Una provincia partida, pero con mensaje claro
El escenario postelectoral deja a la vista una Chubut partida, pero movilizada. Los triunfos de Unidos Podemos en la Cordillera y Comodoro confirman que las regiones más dinámicas de la provincia respaldan un modelo con planificación, defensa del trabajo y cuidado ambiental.
Desde el entorno de Luque destacan que “la Cordillera y Comodoro no votaron solo por un candidato, sino por una idea de provincia que quiere futuro”.
El casi empate técnico con LLA abre un nuevo capítulo político, donde los liderazgos territoriales emergen como figuras clave en la construcción de una alternativa sólida y con identidad chubutense.