En la jornada de este miércoles, la Labor Parlamentaria de la Legislatura de Río Negro decidió no incluir en el temario de la sesión de este jueves el proyecto que pretendía declarar a la educación como un servicio esencial, el cual exigía la implementación de guardias escolares mínimas durante las medidas de fuerza llevadas a cabo por docentes y porteros.
Este proyecto, impulsado por el bloque del PRO, contaba con el rechazo del gremio docente UnTER, ATE y varios bloques de origen peronista. A pesar de haber pasado por las comisiones con dictámenes mayoritarios, la decisión de los jefes de bloque fue postergar su tratamiento.
En respuesta a esta noticia, UnTER informó que su Plenario de Secretarios Generales decidió suspender el paro de 24 horas que había sido convocado para este jueves 5 de septiembre. Sin embargo, el gremio se declaró en estado de alerta y movilización permanente. La suspensión del paro se decidió "en función de haber logrado frenar el tratamiento del proyecto para declarar a la educación como servicio esencial, que iba a realizarse en la próxima sesión de la Legislatura provincial".
El Plenario, que contó con la participación de representantes de las 18 seccionales de UnTER, también ratificó la realización de futuras medidas de fuerza en caso de que se intente avanzar con el proyecto de ley. Desde el gremio, se reiteró que "el verdadero objetivo de esta iniciativa no es mejorar la educación pública, sino cercenar el derecho de huelga y de protesta de los trabajadores, derechos garantizados por la Constitución Nacional y los tratados internacionales".
UnTER denunció que el proyecto "finge defender el derecho de niños y adolescentes a educarse", pero en realidad "establece guardias mínimas obligatorias durante los días de paro que no aseguran el dictado de clases, solo garantizan la apertura de las escuelas y las convierten en meras guarderías". Además, señalaron que el proyecto y sus promotores "no se preocupan por el escaso presupuesto destinado a la educación, que no garantiza edificios escolares en condiciones ni salarios dignos".
El gremio concluyó que, mientras el proyecto siga en consideración, continuarán en estado de alerta, listos para movilizarse y defender los derechos laborales de los trabajadores de la educación.